La implementación de un sistema de registro de compromisos en la minería mejoraría la transparencia y reduciría los conflictos. (Foto: Agencia Andina)
En agosto de este año, el 42.9% de los conflictos activos en el Perú estaban asociados a la minería (SGSD, 2024), lo cual, sumado a otros factores ajenos al control de las empresas mineras, generaron que entre el 2008 y el 2022 no se ejecutaran inversiones previstas por S/55,595 millones (SNMPE, 2023). Así, el potencial de crecimiento del sector se ve limitado por este contexto.
Dentro de las causas de la conflictividad social se tiene el entendimiento público de un “habitual” incumplimiento por parte de las empresas mineras de los compromisos que suscriben con sus grupos de interés, los cuales no suelen ser accesibles tanto en su contenido como en su avance. Este déficit de acceso limita la transparencia, capacidad de seguimiento y verificación de cumplimiento por parte de los interesados, lo cual fortalece el entendimiento público, independientemente del efectivo nivel de cumplimiento de las empresas.
Debido a esto, por un lado, se plantea la necesidad de implementar un sistema de registro de compromisos que permita su sistematización y seguimiento a nivel integral a partir de lo cual se generen alertas de cumplimiento y, como veremos más adelante, lecciones aprendidas para procesos de innovación en la gestión social. Este sistema debe diseñarse bajo la premisa de ajustarse a estándares internacionales y rescatar elementos de relevancia para la gestión en territorio, así como de simplicidad para el usuario. Esta sistematización permitiría que las empresas puedan divulgar de manera ordenada el nivel de cumplimiento efectivo que llevan a cabo y, con ello, minimizar los argumentos que sostienen la narrativa pública de incumplimiento.
Asimismo, esta aproximación se alinearía a las expectativas actuales que se tienen del sector respecto a una mayor transparencia y acceso a la información por parte de sus grupos de interés, tal como lo planteado en “Principios para guiar los minerales críticos de transición energética hacia la equidad y la justicia”, publicado por Naciones Unidas en setiembre último y en cuya formulación participó el ICMM, así como en la última actualización de los estándares EITI.
Por otro lado, en la actualidad, el sector minería reconoce la importancia de crear soluciones innovadoras que permitan orientar el cómo realizar acciones para fortalecer la sostenibilidad del negocio a través de herramientas de inteligencia artificial generativa (IA-Gen), lo que se viene entiendo como Minería 4.0. Recordemos que, para su uso, es clave contar con bases de datos definidas y que respondan a los objetivos del negocio. Así, esta oportunidad de innovación en la gestión social del sector conversa de manera directa con el planteamiento previo del proceso de sistematización y seguimiento de compromisos a través del uso inteligente de datos que permita la generación de lecciones dirigidas a la mejora del desempeño social de las operaciones.
De esta manera, frente al imperativo de asegurar la provisión de minerales críticos a través de procesos justos y equitativos que nos plantea el escenario actual del Cambio Climático, el Perú tiene una gran oportunidad para aprovechar su potencial minero. Para ello, es fundamental consolidar una minería moderna y responsable, alineada de manera efectiva con principios de transparencia y que logra, a partir de un manejo inteligente de datos, implementar procesos de innovación frente a la problemática compleja asociada a la conflictividad social, particularmente la referida a la gestión de compromisos que se asumen con grupos de interés locales.
